Deconstruyendo el Derecho
ABOFEM es una asociación civil de abogadas feministas sin fines de lucro que nació en chile durante el 2018 para luego expandirse como proyecto a la Argentina.
Los objetivos fueron cambiando durante el proceso, pero principalmente las intenciones estaban ligadas a la idea de cruzar las fronteras y desarrollarse internacionalmente deconstruyendo el derecho, proponiendo una justicia no androcéntrica y patriarcal.
A su vez, pretenden derribar la mirada socio-cultural establecida en el sentido común de las personas sobre la profesión, es decir, combatir al sistema, a partir de una disciplina que en sí misma está cargada de preconceptos complejos y yace sobre la estructura de mandatos antiguos, no solo desean atravesar las barreras de género en la práctica, sino que también en el marco de las subjetividades sociales.
Si bien el nombre de Abofem responde a una lógica internacional con el sufijo fem, enmarcando lingüísticamente solo a la figura de la mujer, desde la asociación llevan adelante una ideología donde se proclaman las luchas de las mujeres, disidencias y todo tipo de diversidades existentes, ya que la violencia de género atenta tanto a las mujeres como a las disidencias por igual y hasta en mayor medida.
Por el momento, se encuentran presentes en 11 provincias, desde la organización impulsan la federalización como meta primal con el anhelo de seguir creciendo a lo largo y ancho del país, ocupando los espacios con la misma dinámica transversal feminista popular y disidente.
Melisa Garcia presidenta de la asociación expone: “Nuestro deseo es que, a través de toda la Argentina y Latinoamérica, nuestras integrantes activas de ABOFEM, sean capacitadas y puedan devolver lo aprendido en sus lugares de residencia para hacer de esta iniciativa, una realidad.”
La personería jurídica de la organización se encuentra en trámite, por este motivo, no cuentan con una sede propia. Las consejerías presenciales las realizaban en FUNDECO y Red de Psicologxs feministas que, por el momento, se encuentran suspendidas ante el contexto de pandemia global.
De todas formas, siguen todas sus actividades de forma virtual e incluso impulsaron un voluntariado de ayuda a madres solteras al momento de realizar las compras, tramites u otro tipo de urgencias.
Por esta razón, se las puede escuchar en Spotify a través de podcasts informativos realizados por las participantes de la Asociación, asimismo, ante la cuarentena preventiva y obligatoria que se dispuso frente al Covid-19, pasaron a realizar vivos en la red social Instagram a modo de continuar con las actividades dentro de una nueva modalidad virtual.
Para evitar que se sigan produciendo desmedidamente violencias institucionales, es necesario que se aplique verdaderamente la ley Micaela para todas aquellas personas que se desempeñan en la función pública, en todos los niveles y jerarquías y en los poderes Ejecutivo, Legislativo y Judicial de la Nación.
Los botones antipánico no funcionan, las denuncias no son tomadas enserio, las violencias incluso a se producen desde las instituciones y en muchos casos se sufren consecuencias fatales que podrían haber sido evitadas. Desde el primero de Enero, hasta junio del corriente año, se verifica un 20,59% de femicidios con denuncias previas. Preocupan los números, siendo periodos de tiempo tan cortos.
Los cambios para fomentar la igualdad y nutrir la diversidad están sucediendo y una vez más, nos demuestran que siempre se dan en el marco de lo colectivo. La escucha activa, la empatía y el profesionalismo de las compañeras, demuestra que las luchas tienen cause y que la transformación de la realidad se da a partir de la irrupción de todo tipo de enraizamiento en cuanto a estructuras sociales heredadas de otros tiempos. La construcción está en el #PoderPopular.
vericuetas2020@gmail.com
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| Equipo de ABOFEM |
Los objetivos fueron cambiando durante el proceso, pero principalmente las intenciones estaban ligadas a la idea de cruzar las fronteras y desarrollarse internacionalmente deconstruyendo el derecho, proponiendo una justicia no androcéntrica y patriarcal.
A su vez, pretenden derribar la mirada socio-cultural establecida en el sentido común de las personas sobre la profesión, es decir, combatir al sistema, a partir de una disciplina que en sí misma está cargada de preconceptos complejos y yace sobre la estructura de mandatos antiguos, no solo desean atravesar las barreras de género en la práctica, sino que también en el marco de las subjetividades sociales.
Si bien el nombre de Abofem responde a una lógica internacional con el sufijo fem, enmarcando lingüísticamente solo a la figura de la mujer, desde la asociación llevan adelante una ideología donde se proclaman las luchas de las mujeres, disidencias y todo tipo de diversidades existentes, ya que la violencia de género atenta tanto a las mujeres como a las disidencias por igual y hasta en mayor medida.
Por el momento, se encuentran presentes en 11 provincias, desde la organización impulsan la federalización como meta primal con el anhelo de seguir creciendo a lo largo y ancho del país, ocupando los espacios con la misma dinámica transversal feminista popular y disidente.
Melisa Garcia presidenta de la asociación expone: “Nuestro deseo es que, a través de toda la Argentina y Latinoamérica, nuestras integrantes activas de ABOFEM, sean capacitadas y puedan devolver lo aprendido en sus lugares de residencia para hacer de esta iniciativa, una realidad.”
La personería jurídica de la organización se encuentra en trámite, por este motivo, no cuentan con una sede propia. Las consejerías presenciales las realizaban en FUNDECO y Red de Psicologxs feministas que, por el momento, se encuentran suspendidas ante el contexto de pandemia global.
De todas formas, siguen todas sus actividades de forma virtual e incluso impulsaron un voluntariado de ayuda a madres solteras al momento de realizar las compras, tramites u otro tipo de urgencias.
Bloqueo de la información legal como una violencia institucional
Desde la organización intentan difundir el conocimiento legal de forma que el acceso no sea un privilegio, ya que no se puede luchar por algo que se desconoce. Las políticas públicas que obstruyen el libre acceso a la información son las bases por las cuales se debe comenzar la deconstrucción del sentido.Por esta razón, se las puede escuchar en Spotify a través de podcasts informativos realizados por las participantes de la Asociación, asimismo, ante la cuarentena preventiva y obligatoria que se dispuso frente al Covid-19, pasaron a realizar vivos en la red social Instagram a modo de continuar con las actividades dentro de una nueva modalidad virtual.
Para evitar que se sigan produciendo desmedidamente violencias institucionales, es necesario que se aplique verdaderamente la ley Micaela para todas aquellas personas que se desempeñan en la función pública, en todos los niveles y jerarquías y en los poderes Ejecutivo, Legislativo y Judicial de la Nación.
Los botones antipánico no funcionan, las denuncias no son tomadas enserio, las violencias incluso a se producen desde las instituciones y en muchos casos se sufren consecuencias fatales que podrían haber sido evitadas. Desde el primero de Enero, hasta junio del corriente año, se verifica un 20,59% de femicidios con denuncias previas. Preocupan los números, siendo periodos de tiempo tan cortos.
Los cambios para fomentar la igualdad y nutrir la diversidad están sucediendo y una vez más, nos demuestran que siempre se dan en el marco de lo colectivo. La escucha activa, la empatía y el profesionalismo de las compañeras, demuestra que las luchas tienen cause y que la transformación de la realidad se da a partir de la irrupción de todo tipo de enraizamiento en cuanto a estructuras sociales heredadas de otros tiempos. La construcción está en el #PoderPopular.
vericuetas2020@gmail.com
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